Si eres de los que cada vez que ve a un perro no se puede resistir para acariciarlo; acá te contamos todo lo que debes tener en cuenta antes de hacerlo.
Todas las interacciones que tengamos con nuestro mejor amigo, o, incluso, con cada perro que nos rodea, tiene un impacto importante en ellos. Es por esto que debemos tratarlos siempre con amor y respeto.
Todos los perros tienen personalidades y gustos diferentes, así como hay perros que adoran ser consentidos y acariciados constantemente, hay otros que esto les causa estrés, o, puedes estar sin saberlo, generando un mal momento para un perro que sufre de ansiedad y le teme a los encuentros con personas extrañas.
¿Qué beneficios trae acariciar a un perro?
Además de mostrarle tu amor y respeto, acariciar a tu mejor amigo puede generarte menos estrés, cuidar tu corazón de enfermedades, hacerte más feliz y hasta aumentar las defensas de tu sistema inmunológico. Incluso, si sabes respetar e identificar las diferentes reacciones que tu perro puede tener, te ayudará a mejorar tu lazo con él y crear una relación positiva llena de amor.
¿En qué zonas es mejor acariciarlos?
Tu mejor amigo, aunque no pueda decírtelo, tiene maneras de comunicarte en cuáles áreas de su cuerpo prefiere ser consentido.
Acá te mostramos algunas de sus zonas favoritas, donde es casi imposible fracasar:
Detrás de las orejas.
Barbilla.
Cuello.
Pecho.
Base de la cola.
Después de acariciarlos acá ellos disfrutarán muchísimo tu compañía y te llenarán de amor y agradecimiento. ¡Pero cuidado! Ten presente las zonas donde no les gusta para evitar un mal rato.
Las zonas donde menos disfrutan las caricias:
Cabeza.
Zona superior de las orejas.
Espalda.
Cola.
Patas.
Hocico.
¡Sigue este mapa de caricias y verás cómo lo disfruta!
Lo que deberías tener en cuenta al acariciar a tu perro:
¡Paciencia!
Debes sobretodo, entender que él debe ser quien busque el contacto contigo, no al contrario o podrías estar invadiendo su espacio personal. Algunos perros pueden necesitar un poco de tiempo para sentirse cómodos antes del contacto.
Ser delicado y amoroso
Pasa tu mano gentilmente por las zonas que él disfruta. Acaricia la parte que esté más cerca a ti, evita estirarte o extenderte encima de él
Espacio personal
Evita acariciarlo en intervalos muy seguidos, es decir, si ya lo acariciaste por 10 minutos, dale su espacio y observa su reacción, si te pide más puedes seguir con el cariño, pero si en cambio se aleja o se ve aliviado déjalo ir tranquilo.
¡IDENTIFICA LAS SEÑALES DE ESTRÉS!
Es común que los dueños no sepan identificar las señales que les muestran sus perros. Por eso acá te mostramos unas que podrías tener en cuenta.
Si tu perro comienza a girar muy rápido su cabeza, lamer su labio superior, bostezar o comienzas a ver comportamientos extraños como que mete su cola entre sus patas, se queda estático, lleva sus orejas hacia atrás o se orina de repente, puedes identificar que algo lo está incomodando. Lo mejor en estos casos es dejarlo solo y darle su espacio.
Recuerda que así como ellos quieren que tú estés feliz siempre, tú debes cuidarlo, amarlo y respetarlo igual.
¡Busca primero el bienestar de tu mejor amigo y tendrán una relación sana y feliz!
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