Comprar aquí
Línea Nacional 018000 527 111

Sollamascotas

Nutrecan, Sabuesos, Q-ida Can | Nutrecat, Smart, Q-ida Cat

PERSA

Foto tomada de: www.mundogatos.com

La raza de gato persa es originaria del antiguo reino de Persia (Irán) y Turquía. Es de talla mediana a grande y presenta una estructura corporal maciza. El pelo del gato de raza persa es de tipo largo, suave y muy denso por tener también muy largo el subpelo o pelo secundario. Es de textura fina y sedosa (no lanosa). Una larga gola cubre el pecho y los hombros.

Se trata de un gato sumamente tranquilo y muy perezoso. Los ejemplares de raza de gato persa suelen muy sociables y afectuosos. Otras de las particularidades del comportamiento de la raza de gato persa es que son de voz suave y poco vocalizadora. Teniendo en cuenta sus características comportamentales, es un gato recomendable para vivir en Apartamentos e incluso se lo menciona como el típico gato de almohadón.

El gato Persa es un gato dulce, de temperamento muy pacífico. Un gran dormilón. Tiene una gran necesidad de afecto y requiere de frecuentes muestras de cariño por parte de sus amos; le encanta que le adulen y hacer ostentación de su extraordinaria belleza; adora que le hagan caricias todo el tiempo.  Carece totalmente de ese instinto salvaje del que hacen ostentación otras razas, es más, ni siquiera tiene instinto cazador, lo cual es sorprendente en un gato; es un  gran observador y  poco expresivo. Debido a que sus patas son muy cortas, actividades como correr y brincar no son fáciles para el minino, pero no significa que por esto no debas aunque sea obligarlo a caminar. 

El gato Persa es una raza  ideal para convivir con niños (siempre que estos aprendan a respetar sus siestas). No es una raza  para quienes pasan muy poco tiempo en casa,  ya  que necesita de la presencia y dedicación de sus amos. Hacer amistad con gente nueva no es inmediato. Le toma tiempo confiar en un nuevo miembro de la familia. Una vez lo conoce no tarda en darle cariño.

Alimentación equilibrada y no excesiva, ya que tiene tendencia a engordar. Sus ojos necesitan limpieza diaria ya que, debido a la forma de su nariz, lagrimean frecuentemente. 

El gato persa prefiere vivir en climas frescos o fríos. No sólo por su abundante pelaje sino por su nariz achatada que le impide controlar su temperatura como gatos con nariz más alargada. Si vives en un clima cálido, debes mantenerlo en un cuarto con ventilación continua. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Foto: